No sé como decirte Rodrigo, Doctor, Ginecólogo, Experto ó simplemente Amigo.
Te escribe un padre, abuelo, esposo y suegro enamorado de la vida y más aún de Dios y la Naturaleza.
El cuatro de Agosto de 2014, fui testigo presencial de uno de los acontecimientos más importantes de mi vida, el nacimiento de mi nieto Gianlucca.
Este evento marcó la línea de lo sublime a lo maravilloso, de lo íntimo a lo extraordinario, de lo sencillo a lo grandioso. No hay forma de conjugar los sentimientos de una ilusión que se convierte en tres palabras: Amor, intimidad y natura. Ser partícipe de la experiencia donde la familia es el centro del verdadero núcleo de lo que llamamos alma y corazón, es la culminación y realización del Ser Humano.
Tus manos dirigidas por lo superior, tu mente enclavada en un nuevo ser son el motivo de mi agradecimiento. Para ti, Graciela y Sara mi eterno gracias.
Las palabras se las lleva el viento, las letras se las lleva la eternidad….
Alfredo Zelaya C.
Dios te bendiga