Trataremos de continuar compartiendo con ustedes estas reflexiones que provienen de nuestra experiencia acompañando durante toda nuestra vida profesional a madres con una cesárea previa durante el parto normal de su segundo bebé.
La sensación de «fracaso», de culpa, de inmensa frustración que vive en el alma de cualquier mujer a la cual se le practicó una operación cesárea durante su primer embarazo, es verdaderamente indescriptible con palabras, inmensamente intima de enormes repercusiones en su autoestima y calidad de vida a largo plazo. Sólo aquella a quien se le practicó una cesárea por razones claras y obvias que ella entiende bien, convive con esa sensación de fracaso personal de manera menos intensa.
Debemos enfatizar que lamentablemente ese es un grupo pequeño. La inmensa mayoría de ellas siente claramente la sensación de engaño, de falsos argumentos que «indicaron» la necesidad de realizarla en su primer embarazo.
Hemos aprendido que esa terrible huella psicológica y física la acompaña hasta el único y mismísimo momento en el cual tiene a su bebé en brazos, solo segundos después de haber tenido un parto normal. Allí cura para siempre ese recuerdo frustrante y crece personalmente como ser humano. Es esa la razón principal para entender que el esfuerzo vale la pena.
Estas son algunas de sus inquietudes mas frecuentes:
¿Es posible tener un parto normal después de una cesárea?.
¿Cuanto tiempo debo esperar después de la cesárea para tener un parto natural?.¿Que posibilidades tengo de que resulte?
¿Es peligroso?.
¿Que debo hacer? ¿Como puedo yo ayudar a lograr mi deseo?.
¿Se me va a «romper» el útero?.
¿Va a funcionar mi matriz, teniendo en cuenta que la primera vez «no funcionó»?.
¿Donde lo puedo hacer?. ¿Quien me puede ayudar?. ¿Que dirá mi esposo?. ¿Mi familia?. ¿Es una locura mía? ¿Es peligroso para mi bebé?…
La lista es verdaderamente interminable!
La respuesta a la primera pregunta es clara: Las Normas y Guías del Ministerio de Salud de Panamá, establecen claramente que a una mujer con una cesárea previa, se le debe ofrecer la posibilidad de tener un parto normal, es decir vaginal, eutócico. Así también lo establece la Organización Mundial de la Salud de la Organización de Naciones Unidas. Esta realidad es habitual en los países desarrollados. La triste realidad en nuestro país es que los hospitales públicos y privados no cumplen dicha normativa.
A la segunda inquietud, como lo establecen las normas, puede haber un parto normal seguro 18 meses después de la fecha de la cesárea.
Una madre con cesárea anterior y sin ningún parto normal previo tiene un 75% de posibilidades de tener un parto exitoso. Una madre con uno o mas partos anteriores, además del nacimiento pos cesárea de uno de sus hijos, tiene mas del 95% de posibilidades de culminar exitósamente a través de un parto natural.
A la tercera pregunta respondemos que no existe ningún evento de la vida que no tenga riesgos. Lo que es categórico es que en los mejores centros hospitalarios y de maternidad del mundo, las posibilidades de tener problemas de salud y riesgos a la salud de la madre y/o en niño, es cuatro a cinco veces mas elevado durante una cesárea que en un parto natural. Los riesgos de hemorragias , infecciones, complicaciones quirúrgicas y anestésicas son mucho mas elevados durante y después de una cesárea que durante y después de un parto normal.
Nosotros pensamos que una mujer tiene todo el derecho a expresar sus deseos y anhelos durante su embarazo y la forma, lugar y como va a dar a luz su próximo bebé. En realidad merece todo el apoyo que se le pueda ofrecer en para lograr sus deseos. Lamentablemente lo que sucede habitualmente, es que le dicen que si se puede tener un parto normal después de una cesárea y luego en el transcurso de su control prenatal comienzan a atemorizarla con diferentes «nuevos riesgos» que aparecen en especial las últimas semanas de su embarazo, que impiden que se cumpla su deseo. Es muy común que le señalen por ejemplo que su bebé tiene «poco liquido», que el cordón umbilical esta enrollado en el cuello del bebé, que es «corto», que la placenta está «calcificada»…
¿Que debo hacer? Informarse! Pedirle al médico y al hospital donde va a dar a luz, cual es el porcentaje de cesáreas que tiene dicho médico, dicho hospital. Realizar un plan de parto manifestando por escrito sus deseos y entregarlos al médico, la enfermera y al hospital donde va a dar a luz. Las guías nacionales de nuestro país tienen el formulario adecuado del Plan de Parto que la futura madre puede completar.
¿Se me va a «romper» el útero?
Por supuesto que NO. En la historia de la medicina esta registrado el evento de la rotura uterina durante el parto. Por supuesto que era una catástrofe. Ello ocurría cuando la cesárea era prácticamente incompatible con la vida de la madre y se realizaba una cesárea para traer vivo al bebé al mundo. No había antibióticos, anestésicos, higiene adecuado, etc.
La única posibilidad que existe durante un parto normal después de una cesárea es que ocurra una dehiscencia, es decir una separación de la cicatriz anterior. Ese evento es sumamente raro y se presenta en al 0.01% de los partos normales en mujeres con una cesárea anterior. No produce hemorragia ni dolor. Lo único que sucede en ese rarísimo evento es que se altera la dinámica de las contracciones regulares y rítmicas del trabajo de parto y virtualmente de vicia el proceso y el parto se detiene. Se repite la cesárea en ese caso y nada mas. Ese evento es reiteramos, muy raro y fácilmente detectable durante el parto.
Lo mas difícil y el desafío principal durante el embarazo y el parto de una madre con cesárea anterior es ayudar a empoderar a la embarazada y permitirle responder con hechos, que su útero si funciona! si dilata! su cuerpo si esta perfectamente preparado para cumplir esa función básica para lo que fue diseñado que es PARIR! No existen úteros que no funcionan! Ese argumento es tan absurdo, como decir que un corazón no late, no logra latir!!!.
Graciela & Rodrigo
partonaturalpanama.com